ELABORACIÓN

1. Cortamos el queso en 12 porciones de igual tamaño y las separamos. 

2. Batimos el huevo junto con la leche. 

3. Pasamos cada porción de queso por huevo y, después, por el pan rallado.

4. Repetimos la operación para crear una capa de empanado gruesa y que no se nos escape queso al freír.

5. Calentamos abundante aceite en una sartén pequeña, sin pasarnos con la temperatura para que los triángulos de queso no revienten con el contraste.

6. Freímos los triángulos de dos en dos, volteando una sola vez y procurando manipularlos lo menos posible. 

7. En cuanto tomen un poco de color, los retiramos y dejamos que escurran sobre papel absorbente. Esperamos unos minutos antes de servirlos y los acompañamos de uvas, mermelada, miel, etc.